Bladimir
Ramos
Universidad Autónoma de Santo Domingo
bladimirrb9 @gmail.com
Resumen
Este
ensayo se propone analizar la poesía de Enegildo Peña. Mi intención fue desarrollar
un análisis de corte literario-filosófico. Para el desarrollo del presente
trabajo me valgo de reconocidas voces en la materia y la citación de sendos
versos del poeta en cuestión como una forma de evidenciar el análisis en cierto
sentido filosófico que le hago al texto Más allá de mi sobra del poeta Peña.
Esa temática organizacional me permitió realizar una valoración sensitiva que
pretendió revelar las señales que constantemente están emitiendo las antenas
sensoriales, que todo ser sensible posee y recibe a través de los efluvios de
las cosas que nos auscultan en el lapso de tiempo de esta estadía empecedera y
carnal que nos caracteriza a nosotros los mortales.
Palabras
claves: Poética, verdad filosófica, verdad poética, realidad
real, extrañamiento.
Abstract
This essay aims to analyze the
possession of Enegildo Peña. My intention was to develop a literary-philosophical
analysis. For the development of this work I am worthy of acknowledged voices
in the matter and the citation of two verses of the poet in question as a way
of evidencing the analysis in a certain philosophical sense that I do to the text
Beyond my lefto of the poet Peña. That organizational theme allowed me to make
a sensitive assessment that sought to reveal the signals that are constantly
emitting the sensory antennas, that every sensitive being has and receives
through the effluvia of the things that auscultate us in the time span of this
stay carnal that characterizes us mortals.
Keywords:Poetics,
philosophical truth, poetic truth, real reality, estrangement.
La
calidad de la poesía de Enegildo nos motiva a hablar de ese mundo entrañable y
metafísico que en sus escritos hace presencia. En la poesía del poeta Peña, hay
un argumento de la estética que se explica con la voz íntima del autor. Su
poesía es una reclamación que potencializa la organización de un mundo
desarticulado, un mundo permeado de desordenes y de dudas filosóficas y hasta dudas
triviales. La poesía de este artista es manifestada a través de una expresión que desvirtúa el
lenguaje estándar que muchos poetas sin profundizaciones filosóficas utilizan
para la gestación de su obra.
En
la antología “Juego de imágenes” de Frank Martínez; Néstor E, Rodríguez, opina
sobre el poemario de Enegildo “Más allá de mi sombra” que,
una
tensa correspondencia entre la simplicidad del lenguaje poético y el cariz
especulativo del verso define la escritura de Enegildo Peña. El ímpetu teórico
presente en sus textos ubica su obra entre la dilatada nómina de autores
dominicanos adosados a la práctica de una poesía de corte filosófico que ha
alcanzado matices programáticos en la llamada “poética del pensar” de José Mármol.
Enegildo Peña comulga con esa visión poética en Más allá de mi sombra “al nacer
el pensamiento se hace la palabra”. También hace vanguardia. En “el enigma de
la palabra”, suerte de ars poética incorporada a esta selección, el poeta
dirige la recepción del texto por medio de minuciosas acotaciones con la
intención de hacer del poema una “estructura dentro de la lectura.
Enegildo
es un poeta que ha sabido valerse de las mejores imágenes recreadas en el
recóndito rincón de su imaginación y de esa manera seleccionar los mejores retratos
que como dije brotan de su mente de poeta, por lo que logra con esto, redescubrir una realidad alternativa que es lo
que hace en su mundo poético, ofrecernos una solución, pero esta solución está
enmascarada de un rejuego de palabras que hermosean su obra, y que al mismo
tiempo impiden que a los que no le fue dado el soplo de la sensibilidad;
entiendan. Eso se explica por las revelaciones de verdades poéticas que brotan
de sus creaciones entrañables.
Enegildo
crea mundos opcionales, ausculta en la nostalgia sus experiencias vivenciales
para salir con la gestación de unos versos que desenmascaran y desdibujan la
realidad social que lo circunda. La conexión
que demuestra tener con lo trascendente en su poemario titulado “Más
allá de mi sombra” es muy evidente.Este libro nos muestra, ese mundo opcional
que en su naturaleza poética está más allá de su sombra.
Ante
esto, el maestro Bruno Rosario Candelier sostiene que, el poemario “Más allá de
mi sombre” de Enegildo Peña es,
testimonio de sus inquietudes filosóficas. Su producción
poética revela a un ser preocupado por el sentido de la vida y el mundo, y en
sus reflexiones hay verdades poéticas que atrapan la huella de lo trascendente.
Esta sombra va donde se produce el poema, creando la emoción y la razón de una
escritura, porque en la sombra todo es posible. La poesía atrapa el instante
haciendo de este una filosofía de la palabra donde no existe la repuesta sino
la interrogante, para que la poesía asuma el espíritu creativo de esta sombra.
Este poemario trabaja el signo poético desde el punto de vista metafísico,
haciendo énfasis en lo viviente, en lo existencial y en lo filosófico.
Es una práctica común en la
historia de la poesía universal, pero en la sociedad dominicana también es
reiterativa.
Para
comprobar lo dicho anteriormente, solo tenemos que leer algunos de los versos
que componen el poemario “Más allá de mi sombra”. Veamos:
Sangran
mis heridas
en
los ojos del ser
al
tejer el misterio
de
una sombra que camina.
Una
voz me dice:
su
penumbra es inminente
busca
el vestigio inmutable de su rostro.
Miro
a lo lejos el cristal de la memoria
en
la soledad del camino
interrogando
el espacio de la vida.
Entre
el principio de sus formas
y
la existencia de la nada
que
vive en la sombra;
se
va cerrando la noche,
donde
la realidad busca su lenguaje
y
despierta mi agonía:
-Madre,
una voz escucha tu silencio-.
-Hijo,
la muerte es una sombra que camina.
El
poeta que nos concita ha sabido emparentar con lo consustancial de lo divino, de lo trascendente, para esto
se vale de unas verdades filosóficas que sorprendentemente entonan con las
verdades poéticas que subyacen en el mundo metafísico que pernota en su poesía.
Las imágenes inmortales que cohabitan en sus poemas, nos deleitan el hondón que
tiene todo lector que se estremece al leer literatura con calidad. El poeta
Enegildo Peña para conformar tan singulares aportes poéticos ha elegido los
signos lingüísticos de tal manera, que el fluir sonoro de las palabras que utiliza
nos traslada a una realidad metafísica a través del plano fonológico que crea sonidos
con matices connotativos.
“Solo
el sueño existe/ y en la sombra nos hace ser nosotros”, dice el poeta Peña.
Ese
sueño del que habla nuestro autor, solo existe en la realidad alternativa que
existe en los efluvios de lo metafísico, y que se concretiza en los poemas que conforman el poemario “Más
allá de mi sombra.” Esa sombra de la que habla
Enegildo es la misma sombra a la
que se refería Platón en el texto El Mito de la Caverna.
Enegildo
en su lenguaje poético, apunta que solo somos la representación de la esencia
que hay en el más allá de nosotros, en el más allá de nuestras sombras; de
nuestras apariencias. Somos la apariencia de lo que deberíamos ser, pero esa
sombra deja de ser figura en ese mundo que nuestro estudiado autor desarrolla
en su poesía, y lo hace a través de una voz poética que expresa verdades
metafísica; verdades divinas. Bien lo expresa nuestro poeta en unos de sus
versos: /la reminiscencia de otros/ que aun están en nosotros/.
Estos
versos son un cuadro de la humanidad. Nos explica en su leguaje poético que
podemos dar más, que si llegamos a este mundo fue para aportar. Enegildo,
designa una apercepción que concibe su estadía vivencial como la responsable de
la captación de los comportamientos culturales y espirituales. Así nos da una
realidad alternativa, como dice Bruno, nos permite conocer la realidad real, y
para comunicarlo se vale de un cúmulo de significantes que se combinan y nos
dan como resultado la estética; la plena literalidad de la que habla Jackoson en
literatura. El poeta para la
conformación de su obra, utiliza vocablos que brotan a manera de efluvios, y
estos conforman imágenes poéticas que denotan acepciones transcendentales.
Esa
buena selección de su vocabulario, le ha permitido que los diversos rasgos fonológicos se entrelacen,
y de esa manera deleitan nuestros sentidos.
El poeta Enegildo selecciona las palabras con la intención de que estas
hermoseen su discurso, y que a la vez, denoten un pensamiento profundo porque
como dice el poeta y ensayista Fernado Cabrera,
su poesía es más metafórica en su
entramado creativo, porque __el poeta__ se revierte en su
adolorida sombra existencial, para reencontrarse con sus angustias ancestrales.
Más allá de su sombra apesadumbrada, busca el resoplo de su poética. Es decir,
la sombra no es un simple vocablo lingüístico o metafísico, sino un estado de
su gnosis vivencial. Cada poema
representa una búsqueda consciente de un universo poético más propio y
creativo. Hoy nuestras manos
tocan silencio de sombra hasta que los
ojos se queden dormidos __para siempre__ y, después de
los siglos y los siglos, puedan levantar el instante de lo eterno. Mientras, en
la sangre un pájaro vuela conmigo y va despertando los signos ocultos que nos
unen, y la luna nos mire haciendo de la
noche: silencio de sombra.
Confieso
que no había tenido hasta ahora un contacto profundo con la poesía de Enegildo.
Ahora que lo he tenido, he experimentado un gozo ornamental al acoplarme con la
gravidez asombrosa de su obra(cosa poco inusual en mí). Y es que nuestro poeta trata temas tan diversos como los prejuicio que se tienen, el miedo que muchas veces siente un escritor al
momento de escribir, por temor a que el
lector sepa demasiadas cosas sobre él, porque a veces se escapan confesiones y
de ahí, la importancia de la poesía, que revela verdades poéticas, pero también
particulares.
Veamos
cómo expresa el poeta Enegildo lo planteado:/Los garabatos de su alma/conversan con la noche al
revelar el otro en la palabra. /Dentro de la noche/hay otro escondido/ en su negrura/ quizás sea yo.
Ese
extrañamiento, esas sensaciones que siempre están emitiendo las cosas y que el
poeta se encarga de descodificar para luego codificarlas en su lenguaje
universal es lo que más ha incidido en la formación de este poeta que es un
creador de mundos posibles. Enegildo ha
sabido anclar con la filosofía en su poesía. El poeta percibe y casi siempre inconscientemente
da a conocer verdades poéticas, y esto es lo que ha hecho Enegildo con su texto
“Más allá de mi sombra”, dar a conocer una realidad superficial con
alternativas universales expresadas mediante el lenguaje divino de la poesía.
Sin
temor a equívoco, puedo decir que el poemario guarda una estrecha relación con
la realidad que rodea al autor. Como dijo Simónides “La pintura es poesía muda,
y la poesía, pintura que habla”. Bien lo decían los griegos el
poeta es el vidente que conoce el sentido oculto de las cosas, y de los
seres, que desposa el misterio, penetra en el absoluto y reinventa la realidad.
Es innegable que toda obra artística surge de la realidad, de la experiencia
vivencial, por esto un poema como una novela tiene que tener relación, de alguna manera, con el
mundo que circunda al creador.
La
obra literaria debe ampararse en la fricción con los objetos, en percepciones
que son frutos del encuentro con las cosas que nos convocan por su don de
abstracción.La obra literaria debe ser fruto de esa conexión con los seres. El
mundo del poema debe estar marcado por la experiencia humana, experiencia que
puede ser carnal o espiritual. Esto es lo que ha engrandecido la obra de
Enegildo Peña.Ha entonado su poesía con lo cotidiano.Ha manifestado estas
simplicidades a través de verdades poéticas, por esto, y otras razones siento
que nuestro poeta ha dejado un comprobable legado a su pueblo.
¡Enhorabuena señor Enegildo
Peña, felicidades!
Referencia
bibliográfica:
Martínez, Frank,2001, Juego de imágenes, La nueva poesía
dominicana. Santo Domingo, R.D: Editora Búho.